Palabra Del Aliento Para Bendecirte Hoy

Palabras de Aliento

 

El éxito a la manera de Dios

 

Por Charles Stanley

Aunque una persona lea todos los libros que existan, los resultados no están garantizados. En realidad, la única manera segura de vivir victoriosamente es a la manera de Dios.

 

Josué 1.5-9
Un estudio provechoso sobre el éxito debe comenzar con una definición correcta del mismo. El mundo usa palabras como riqueza, fama y posición para referirse a la buena vida. Pero, a pesar de que éstas son señales de éxito, el verdadero triunfo significa llegar a ser la persona que Dios quiere que usted sea, y lograr las metas que Él le ayude a fijarse.
Dios escribió el Libro sobre la vida triunfante. Ha entretejido sus preceptos, presentados en el libro de Proverbios. El Señor es tan perfecto que nadie ha inventado jamás un sistema mejor. Muchas personas han tratado de vender la receta para el éxito. Pero si usted lee sus libros, notará que muchos de esos autores usaron preceptos de la Biblia, a menudo sin saberlo.

Aunque una persona lea todos los libros que existan, los resultados no están garantizados. En realidad, la única manera segura de vivir victoriosamente es a la manera de Dios. El Señor le enfatizó a Josué la importancia de permanecer dentro de su voluntad. Mientras que el nuevo líder de Israel se guiara por los preceptos de la Biblia, tendría éxito, lo cual era la intención de Dios. Podemos leer muchos libros sobre cómo vivir bien, comer saludablemente, salir de deudas, ascender en la empresa, criar hijos responsables, etc. O podemos ser guiados por el Libro que ofrece los principios para el éxito en todas esas áreas.

Algunas personas dan la impresión de estar haciendo bien las cosas por sí mismas, pero por dentro se halla un alma agitada. En cambio, Dios no sólo prepara a los creyentes para el éxito; también los tiene a salvo en su mano. Si somos obedientes a Él, aunque fallemos a los ojos del mundo, siempre tendremos gozo, paz y contentamiento.

El plan de Dios para el éxito

Proverbios 3.5-12
Cada vez que digo que el Señor desea que sus hijos tengan éxito, alguien trata de negarlo. Un hombre o una mujer de la congregación mira su vida, y piensa: ¡No yo! ¡No estoy teniendo éxito en nada! Tengo dos respuestas para ayudar a esa persona a tener una manera de pensar diferente. Debemos definir al éxito como Dios lo hace. Segundo, debemos seguir su plan para tener una vida triunfante.

Paso 1. Fíjese metas de acuerdo con la voluntad de Dios. El Padre celestial ha hecho un plan a la medida de cada creyente. Seguirlo exige oración sistemática y meditación en las Escrituras. Sólo cuando tenemos la mente enfocada en Dios somos capaces de determinar la dirección correcta para nuestras vidas.

Paso 2. Ande en obediencia delante de Dios. La Biblia está llena de principios realizables, porque el Señor espera que su pueblo los use. Si aplicamos su Palabra a nuestra vida diaria, la única alternativa que tenemos es vivir victoriosamente, aun en tiempos de pruebas y “fracasos”.

Paso 3. Use sus dones para la gloria de Dios. A todo creyente le ha sido dado el Espíritu Santo como Consolador y Guía (Jn 14.16, 17). Además, cuando una persona es salva, recibe uno o más dones espirituales (Ro 12.6-8). Dios nos da el Espíritu y los dones para ayudarnos a realizar las tareas que Él nos pone por delante.

El éxito es condicional. Dios no nos ayudará a lograr los propósitos que estén fuera de su voluntad. Su plan por excelencia es transformarle a usted a la imagen de Jesucristo. El Señor ya ha diseñado el plan perfecto para darle a usted una vida espiritual exitosa, partiendo de sus circunstancias actuales.

+ Prédicas Escritas | Charles Stanley